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「波」𝐖𝐞𝐥𝐜𝐨𝐦𝐞─ ──❪ ❛` :wine_glass: :rose: `❜ ˚˖ ⁺ ◌;❜

*ೃ✧˚. ❃ ⇢ ˊ- 𝐓𝐨 𝐌𝐲 𝐁𝐥𝐨𝐠;; ϟ |° ۪۪̥

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⇢ —⩩̷̷ۣ֞๑ᩧ̼̼༘ꪾ麗雅ྀ⊰๊ེ᷼ᩬටි͢Ꭾ⃨ꪖ⃨᭣᭫ꪀ͍ ๑ᩧྀ̼̼༘ꪾ⊰๊ེ᷼ᩬ :es:

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Este Escrito será un One-Shot,

participando en el Concurso

Oficial del Staff. Abajo os dejo

la Imagen que me tocó.

Irá sobre la diferencia entre

dos Pokémon que son:

Absol ♀ y Gallade ♂.

Son como dos polos

Opuestos que se atraen.

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╰───╮; 我们生来就死了 ❛ﾐϟ❜╭───╯

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#OffTopicDays

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En un pequeño bosque, no muy lejos de uno de los

Pueblos de estas grandes Regiones de Pokémon,

una pequeña "Pareja", pues actualmente son

amigos, no de la infancia, pero si llevaban años

conociéndose. Se encontraban los dos, una

elegante Gardevoir y, un caballeroso Gallade junto

a un gran lago, despejado de árboles ante sus

vistas, junto a una suave y fresca brisa que

adorna con el movimiento de vegetaciones u

otros. A los alrededores, se encontraban más

Pokémon, disfrutar de la calma que el lugar les

brinda.

— Gallade, ¿quieres relajarte? no creo que alguien

quiera venir a capturar nos, ¿por qué vigilas tanto?

El nombrado, miró de refilón a su amiga, ya que esta

sabía el por qué lo hacía, se lo había dicho y

explicado en más de una ocasión. Giró su delgado

y fino cuerpo, mirando hacia ella.

— Sabes el porqué Gardevoir. Nunca está de más

revisar un poco por seguridad, ya nos has pasado

dos veces, que nos hemos despistado y ya

teníamos a un entrenador intentando atrapar nos.

— Lo se gruñón, solo te estaba tomando el pelo,

venga, no seas tonto y siéntate conmigo -dio

toques sobre el césped, a un lado suyo.

Suspiró levemente, sonriendo a la contraria para

luego acercarse y acabar por sentarse. Ambos

hablaban de la belleza que ese Mundo les estaba

ofreciendo, junto a otras especies diferentes de

Pokémon que rondaban en ese momento. De vez

en cuando algún Entrenador o simplemente

Personas pasaban cerca, pero nada que al final

los acabara alertando, ya que estos preferían

dejarlos tranquilos, además, tampoco es que fueran

sus objetivos.

La noche calló, con el reflejo de la luna sobre el

agua y algunos Illumises y Volbeats revoloteando

en pareja sobre el lago, iluminando con ese cálido

destello. Gardevoir desvió la mirada de aquel

hermoso espectáculo para mirar de reojo a Gallade,

su más amable y dulce amigo. Bajó su mirada,

fijándose en la mano de este más cercano a ella,

con lentitud, ella acercó la suya para dejarla sobre

la de el, más aquella acción jamás se produjo.

Un estruendoso rugido se produjo no muy lejos

la laguna.

— Alguien está en peligro -Alcanzó a decir Gallade

antes de levantarse y salir corriendo.

— ¡No, espe..ra..! maldición.. -Farfulla en voz baja,

levantándose para perseguirlo en el acto.

Gallade se había adentrado en el bosque, buscando

el camino de donde provenía el rugido, dejando atrás

a su amiga. Volteaba la cabeza de un lado a otro,

hasta que volvió a escucharse, alzando la vista, justo

detrás de el, en lo alto de una pequeña montaña.

Apenas se podían apreciar dos siluetas, una más

grande que la otra, la más pequeña evitaba lo

que parecían ataques del más grande, debido a los

árboles, la luz de la luna no alcanza a mostrarlos.

Gardevoir quedó entre un poco detrás y a un lado de

el, mirando hacia la misma dirección.

— Hey.. venga, vámonos -Agarró un poco su mano-

No es asunto nuestro lo que está pasando entre

ellos, no los interrumpas.

Escuchaba las palabras de su contraría, más este

Justiciero, no era de abandonar a otros a su suerte.

El Pokémon de la baja estatura, de lo que parecía un

golpe o zarpazo, lo mandó contra uno de los árboles

que estaba cuesta abajo, rompiendo lo en el acto,

dejándolo mal herido. Dando unos pasos al

frente, las siluetas de ambos ahora se mostraban

ante la luz de la fría luna, pues el de la baja estatura,

era un Absol ♀, debido a su estado, es apreciable

que llevaban un buen rato en combate, mientras

que el de la silueta mayor, trataba de un Ursaring ♂,

se desconocía por completo por qué actuaba de

manera agresiva. El Pokémon, bajó corriendo de la

pequeña colina, iba directo hacia el otro que había

alcanzado tirar con su ataque. En un impulso rápido,

Gallade se había soltado del agarre de su amiga,

quien extendió uno de sus brazos para pararle.

Se puso entre ambos Pokémon, frenando el

ataque del impulsivo Ursaring con sus propios

brazos, no quería atacar al ajeno, pero de algún

modo tenía que frenarlo, así que no le quedó más

remedio que usar "Gancho Alto", lanzando al ajeno

por los aires, alejando lo y causándole bastante

daño. Su mirada solo se centró en el Ursaring, quien

calló sobre el suelo mientras el seguía en posición

defensiva. Intentó recomponerse, pero no para

volver a atacar, si no para salir corriendo. Espero

hasta que su silueta ya no fuera visible, bajando los

brazos, se agachó, mirando las heridas de Absol,

quién apenas abrió los ojos para mirarle, abriendo

su hocico para decirle algo, más en el mismo acto,

quedó inconsciente. La belleza de la luz de la luna,

iluminaba con intensidad la cara de aquel

Pokémon inconsciente, con la mirada de Gallade

absorto en su rostro, sus ojos se clavaron sobre

ella, pues en el, un ligero brillo pasó por un leve

momento por sus ojos.

— ¡Gallade! -Su amiga hacia rato que lo estaba

llamando, volvió en si cuando levantó su cabeza-

¡Despierta!

— ¿Qué..? ah.. lo siento Gardevoir, me centré

demasiado en las heridas que tiene.. oye, ¿podrías

curar la?

— ¿Por qué? apenas la conocemos, y ¿si nos

ataca cuando se recupere? me niego a ayudar a

una desconocida.

— Humm.. -Miró algo seco a su amiga por su

respuesta. Se agachó, posicionando ambas

manos sobre su dañado cuerpo y usó "Pulso Cura",

no la sana del todo, pero la dejaría algo estable-

Mucho mejor, te llevaré con nosotros hasta que

te recuperes -Dijo al momento de tomarla entre

sus brazos y cargar la, viendo como esta

comenzó a levantar sus párpados debido a la

sanación producida por el y que ahora, es

consciente de lo que pasaba y decían.

— (¿¡Qué!? ¿¡por qué!? ¡es solo una carga!) -Pensó

Gardevoir al ver como cargaba con ella- Si, con

nosotros estarás segura, lejos de otros Pokémon,

Entrenadores y Cazadores.

Absol por su parte, no decía nada, más asintió en

agradecimiento por la caridad de ambos, a la hora

de ayudarla, sobretodo, agradeció por la de el. A

empezado a aparecer el verdadero ser de Gardevoir,

un Pokémon de tipo Psíquico/Hada el cuál, ya era

Posesiva con el, pero no era tan evidente como se

comenzó a demostrar con la llegada de un Tipo

Siniestro que encima, es Hembra.

Regresaron a la laguna, con la calma devuelta tras

haber resuelto el problema. En una pequeña parte

del lugar, era donde estos dos se quedaban, con

unas camas hechas de hojas, usando ramas y otros

materiales del entorno para hacer la parte del techo,

que los cubra especialmente de la lluvia. Gallade la

dejó sobre sus propia cama, algo que a Gardevoir no

le gustó en lo absoluto. No le gustaba presenciar

como actuaba de forma amable hacia alguien que

no fuera si misma, pues lo quería solamente para

ella, para ella y nadie más. Ya había ayudado a otros

antes, pero, o eran Machos, o eran solamente crías,

pues cuando había una Hembra de por medio,

lograba espantar la y, una vez más, lo volverá a

hacer, pero con un cambio inesperado, pues a

diferencia de los otros, supo como controlar sus

sentimientos y emociones.

— Bien, iré a por más hojas. Ahora mismo vuelvo,

no tardaré mucho -Alzó una de sus manos,

sonriendo antes de alejarse.

— Ten cuidado -Mientras esperaba a que se alejara,

habló dirigiéndose a Absol, con un tono "dulce"-

Querida, ¿cómo te sientes? pensábamos que

con las heridas que tenías, no ibas a lograr

salvarte -Cambió su tono a uno en un intento de

sonar "Preocupada".

— .. -Sin siquiera mover su cabeza, pues aún no

estaba del todo recuperada, miró a Gardevoir,

abrió un poco el hocico y en un tono bajo, le

respondió- B-bueno.. si no llega a ser por.. por

ambos, yo no.. no estaría aquí, ahora.. os debo mi

vida..

— Me alegra querida -Su sonrisa se mostró falsa.

Miró por donde su amigo se había ido, ya sin estar

a la vista, la miró, en ese momento, Absol volvió

a abrir su hocico para hablar, pero acabo siendo

interrumpida por un tono de voz bastante.. diferente

a la anterior, más antipática y enfadada.

— Tú, mosquita muerta, ni se te ocurra acercarte a

Gallade, ¿me has oído bien?

— Pero si yo no..

— ¡Silencio! aún no he terminado.. -Cruzó los brazos

entre si- Cuando termines de recuperarte, te largas,

¿entendido? no quiero volver a verte, mientras estés

con nosotros, ni se te ocurra hablar o pegarte a el,

¿¡lo has comprendido!? ¡el es mío y de nadie más!

— ..Si, lo he entendido perfectamente.. -Mantuvo

una mirada seria ante esta.

— Así me gusta, no lo olvides -Se percata de que

de que su compañero regresaba y alzó uno de sus

brazos muy feliz.

— Perdón por tardar, aproveché a traer bayas -Dejó

dos junto a Gardevoir, otras dos junto a Absol, a

quién miró con atención y se quedó ahí, agachado,

pues estaba despierta- ¿Cómo te sientes? ver a

un Pokémon como tú por aquí, es algo extraño,

soléis estar por lugares nevados aún que imagino

que por alguna razón, tuviste que alejarte. Espero

que podamos conocernos -Sonrío dulcemente.

— ..-Quería evitar en todo momento hablarle he

incluso mirarle, pero no pudo evitar mover sus

pupilas, mirando a quien la salvó. Un ligero brillo

apareció en sus ojos, fue tan solo un pequeño

instante- Tú.. -Realmente, no quería dirigirle la

palabra por la amenaza de la ajena, más no pudo

evitar reaccionar, recordando que fue quien le

había protegido de aquel ataque he incluso la

cargó. Escuchó a alguien toser, siendo Gardevoir

para llamar su atención y que recordara de lo que

hace poco habían hablado- Gracias.. solo.. solo

eso.

Con una de sus patas, atrajo las bayas y se volteó,

dándole la espalda y comiendo. La reacción de este

fue de confusión, mientras que de la otra fue una

sonrisa. La dejó tranquila, yendo a donde dejó las

hojas que había ido a buscar para hacer otra cama,

agarrando una de las bayas, no comió, solo se la

quedó mirando. Gardevoir se comió las dos, Absol

solo dos bocados de una de ellas y Gallade, ninguna.

La noche pasaba lenta, con el grupo dormido, menos

Absol. Alzó la cabeza lentamente, esperando que los

dos estuvieran dormidos, así que hacía pequeños

ruidos para comprobarlo, y así era, ninguno de los

dos se inmutó, así que aprovechó a levantarse,

le costaba por algunas heridas. Sin desistir, al fin

se alzó y se alejó caminando hacia la laguna,

quedando muy cerca de la orilla, mirando la Luna.

Gallade a a los pocos minutos, despertó debido a

una pesadilla, respirando agitada mente. Miró hacia

donde estaban las chicas, pero solo una faltaba.

Rápido se levantó y empezó a buscarla, corriendo

hacia la laguna, volteaba hacia los alrededores

hasta que alcanza a verla, suspirando aliviado. La

miro algo sonriente, con sus párpados a medio

cerrar.

Era tan pacífico, un momento en el que a muchos

les haría pensar en muchas cosas, reflexionar en

temas relacionado a sus vidas u otros. Gallade

no apartaba su mirada, incluso su pelaje en

movimiento la hacía ver elegante, como una Dama

Siniestra y el su Caballero, eso era en lo que el

estaba pensando, hasta que un extraño movimiento

de parte de ella, lo alertó, cayendo hacia adelante,

quedando sobre el agua.

— (¡Absol!) -No quería gritar, podría irrumpir el sueño

de su amiga, así que lo evadió y corrió hacia el agua.

Llegando, se va metiendo en el agua, llegando a

cogerla entre sus brazos, pegándole con cuidado

a su torso. Trató de sacarla del agua, pero paró

pues la escuchó hablar.

— ¿Q-qué haces.. aquí..? deberías estar d-durmiendo..

— Me desperté por una pesadilla, y cuando giré

para saber si estabais bien.. no te vi, creí que te

habías ido. Mírate, aún tus heridas no han sanado,

no deberías de estar haciendo esfuerzos.

— Mumpf.. -Se movió un poco, colocando sus patas

sobre su fino torso y no a propósito, pues ella

quería apartarse de el- S-solo estoy algo can..

Al levantar la cabeza, se encontró con el rostro del

ajeno, más en específico su dos orbes, mirándolo

con suma atención. Ambos la mantenían,

comenzando una larga y profunda conexión. Gallade,

un Pokémon conocido por saber lo que siente su

entrenador y sentir lo mismo, aún que en este caso,

no había un entrenador de por medio, ni tan siquiera

su propia amiga atrajo su atención, pues solo la

veía y la ve, como una Hermana a la que ha estado

protegiendo y cuidando de manera fraternal. Los

rostros de ambos comenzaron a aproximarse,

incluso alcanzaban a sentir el aliento del otro, tan

lejos pero a la vez tan cerca.. apenas y a escasos

centímetros, con sus labios rozando el uno con el

otro. Un pequeño salpicón por parte de un Magikarp,

cortó el intento de un beso entre ambos, cubriéndose

para mirar al Pokémon, luego se miraron entre ellos,

rápido alejándose con un sonrojo en sus mejillas.

Salieron del agua, ella se sacudió para quitarse ese

peso que le causaba el agua por su pelaje. Juntos

regresaron a sus camas, el la vigilaba por si en algún

momento volvía a caer.

— B-buenas noches, Absol -Su voz lo mostraba

nervioso.

— Buenas noches.. Gallade -En cambio el tono de

ella era dulce y cálido, sonriendo y acomodándose,

procediendo a dormir.

Este sonrió, también quedando acomodado y cerrando

los ojos para volver a su sueño. Había algo en lo que

ninguno de los dos se percataron.. Gardevoir, lo

había visto todo, absolutamente todo. Como el,

ella también podía saber como se sienten los demás,

pero ella sabía como desviar que este supiera,

acerca de sus otras emociones, y, ahora mismo,

solo le guardaba rencor, un rencor que provocará

algo catastrófico..

Los días continuaban con calma, al menos, solo

para dos de ellos, habían pasado casi dos Meses.

Absol, a medida que se iba recuperando,

Gardevoir le hacía alguna que otra

"jugarreta" que le hiciera daño, ya sea empujándola

de forma indirecta contra algo, incitando a otros

Pokémon a atacarla al provocar los, entre otros.

No siempre salía como ella quería, pues hacía que

ellos se acercaran aún más, explotando en rabia.

Iba a usar su Plan B, dejaría por último el A, esperando

no tener que llegar a eso y aún que llegara, lo

haría sin titubear. Aprovechó que el se había un

momento, empujando a Absol de manera brusca

contra el árbol y la acorrala.

— ¿¡Te crees que soy estúpida verdad!?

— ¿De qué estás hablando..?

— ¿¡Crees que no me daría cuenta de lo que pasó

entre tú yel!? te lo advertí.. -La sujetó del cuello,

golpeando su cabeza contra el tronco.

— ¡Ungh! -Intentó apartar el brazo con sus patas,

y si, aún que tenga ventaja sobre ella por su tipo,

tampoco buscaba atacarla pues en si, tenía razón,

ella llegó de la nada y le arrebató lo que Gardevoir

más deseaba.

— Si quieres vivir.. si de verdad aprecias tu

insignificante vida.. lárgate, lárgate y no vuelvas..

Te lo dije aquel día y ya estás mejor ahora, quiero

que te inventes algo y te marches, que le rompas

el corazón y..

— ¡N-no pienso.. no pienso hacerle.. daño! ¡no se

m-merece lo que le estás.. haciendo!

— Y ¿¡quién eres tu para juzgar lo que es bueno o

malo para el!? ¡no sabes nada de el! -Utilizó la

otra mano, aumentando la presión en su cuello-

Estás a tiempo.. haz lo que te digo, y no tendrás

que morir hoy..

— ¡..! -El aire ya apenas le llega, su visión empezó

a nublar se, ni fuerzas tenía para intentar apartar

sus brazos- N-n-nun..ca.. a-aah.. -Las lagrimas

nacieron, saliendo de sus ojos y quedando en su

pelaje blanco y puro como la nieve.

— Bien.. la muerte a sido tu elección.. ¡Muere de una

vez por todas! -Estranguló con la fuerza que tenía

— ¡¡Gardevoir!! ¡¡¡bastaaaaa!!! -Corrió, apartando

las manos del cuello de Absol, agachado, mirando

como esta intenta recuperar su aliento. Enfadado,

se levanta mirándola- ¿¡Por qué? dime ¿por qué has

intentado matarla!?

— G-gallade yo.. es que.. -No sabía que decir,

estaba algo paralizada.

— ¡¡DÍMELO!!

— ¡Porque te amo! ¡tu deberías ser solo mío, de

nadie más! ¡¡desde que llegó ella, las cosas han

sido muy distintas, y no permito que otra Hembra

se acerque a ti!! Gallade yo.. -Se apoya sobre su

torso, pero es apartada al instante.

— Así que esta eres tú.. siempre has sido así,

¿verdad Gardevoir..? ahora comprendo muchas

cosas.. Es mejor que te vayas, esto a acabado

-Se giró para volver con Absol.

— ¡P-pero Gallade..! -Extendió la mano hacia el.

— ¡He dicho que te vallas! se acabó.. -Lo dijo al

momento de girar se hacia ella, con una mirada

totalmente fría, tan fría que podía sentir toda

su decepción he ira hacia alguien, que consideró

su hermana por varios años, alguien, que resulta

que solo le había fallado durante tanto tiempo.

— E-esta bien.. cuídate, por favor.. hasta siempre

-En el momento que se giró, sus lagrimas cayeron

por su rostro, alejándose para no volver.

— Hasta siempre.. Gardevoir.. ojalá todo te vaya bien..

El silenció adornó el lugar, acompañado con el

movimiento de las hojas. Una pequeña lágrima

escapó de su ojo izquierdo. Absol había logrado

recuperar su aliento, quedando detrás de el.

— Yo.. l-lo siento mucho.. si yo no hubiera

aparecido, nada de esto hubi..

— Si tú no hubieras llegado, jamás me habría

dado cuenta de lo que realmente pasaba -Giró

su cuerpo, mirándola con una sonrisa, pero

ahora mismo estaba triste, mostrando sus

lagrimas- Gracias a ti, me liberé de algo que me

habría causado muchos problemas a la larga..

— Gallade.. -Se alzó, quedando a dos patas,

tratando de mantenerse mientras se acerca a el.

Este la ayuda, acercándose. Una de sus patas

quedó sobre su pecho, el otro limpió sus mejillas,

adornado con caricias- Desde el día que me

salvaste, solo pienso en protegerte y alegrar tu

vida cada día de la mía.. mi salvador, mi

caballero

— Absol.. gracias por estar aquí, pues pasar por

esta situación solo me.. habría destruido, mi

Dama Siniestra.. yo..

Inclinó su cuerpo, acercando nuevamente su rostro

al de ella, escuchando un "Te amo" salir de los dos al

mismo tiempo, alcanzado a fundir sus labios en un

dulce y apasionado beso, uno en el que ambos

esperaban desde hacía tiempo. Pese a las diferencias

de tipos que ambos contienen, no era un impedimento

para ninguno, pues lo que prevaleció pese a sus

diferencias, fueron aquellos momentos que

pasaban juntos, esos sentimientos que afloran

sin uno poder evitarlo. Algo que se suele decir

mucho y es bastante cierto, es que: "Dos polos

opuestos, atraen" y así es, pues uno tiene lo que

el otro necesita y al revés, esto aporta y ayuda en

ambos, un amor que se mantendrá firme ante las

adversidades, que se apoyarán mutuamente hasta

que la vida misma, toque a su Final mientras tanto,

Gallade y Absol disfrutarán de sus vidas juntos.

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Gracias por leer.

-Hace una leve reverencia-.

Nos volveremos a ver.

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